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jueves, 7 de mayo de 2020

EFECTOS DE LA PANDEMIA EN CHILE: DESDE LA REFLEXIÓN A LA ACCIÓN

Artículo de opinión. Por Lorenzo González Cabrera, miembro del CODEHS.


NOTAS INTRODUCTORIAS

Como asociado y dirigente de la Federación Nacional de la Subsecretaría de Salud Pública y asumiendo las definiciones a las que hemos contribuido desde el momento mismo que nos constituimos en organización. Hemos avanzado en la defensa del Fortalecimiento de la Autoridad Sanitaria, y su tarea de proteger la salud de la población.

Hacerlo en la noción de las Determinantes Sociales de Salud, que nos llevan a ampliar la mirada para comprender la salud como una cuestión de seguridad nacional. Los efectos de la pandemia así lo demuestran. No es algo que sólo atañe a un grupo determinado de la población nacional sino a toda ella en su conjunto.

 La Salud y el bienestar son un desafío permanente, es por ello que creemos que hay que pasar de la declaración a la acción. De la propuesta a la protesta. El presente texto nace de la revisión de documentos anteriores y de reflexiones compartidas por compañeros a través de las redes sociales en las que nos encontramos cotidianamente. Invitamos a quienes estén de acuerdo con estos contenidos a suscribirlo.

EL VIRUS, LA PANDEMIA LA SALUD, LA ECONOMÍA Y OTRAS COSAS

La situación mundial, a consecuencias de la llegada (al parecer indefinida) de la Pandemia mundial generada por SARS – COV2, que viene afectando de diferentes maneras y en un proceso ininterrumpido a los países del orbe, ha puesto a la humanidad una preocupación nunca antes vivida.

En efecto, los contagios producidos por el Coronavirus, a la fecha, parecen ser cifras no alcanzadas históricamente, no obstante, éste se encuentra provocando altos niveles de conflictividad en algunas áreas del quehacer. La confrontación de miradas para enfrentarlo son muchas, de un lado la presión que ejercen, directamente, o a través de ¿sus? Estados en las organizaciones intergubernamentales, amenazando la reducción o suspensión de los aportes para su sobrevida (así Trump con la OMS) o como se indica en el reciente ajuste presupuestario nacional.

LA ESTRATEGIA DE LA IMPROVISACIÓN

En estos días, como ha sido desde que se instaló la pandemia en Chile, hemos visto cómo las estrategias de contención y combate han mostrado una enorme diversidad, contándose con una enorme batería de instrumentos, los que son utilizados o desechados, en los diferentes países, ya sea por énfasis específicos en ciertas miradas de salud u otras formas de priorización como es el caso de Chile, donde evidentemente la priorización se ha colocado en los aspectos económicos por sobre los de salud (salubristas, epidemiológicas y sanitarias, sean preventivas o remediales).

Los niveles de conflictividad entre las potencias, la guerra híbrida desatada, la guerra comercial, y comunicacional han creado ingentes dificultades en el mundo entero.

La caída de las bolsas, la crisis generada en el bajo precio del petróleo, la variación permanente de las divisas, provocadas por estos hechos, son cuestiones que invariablemente comenzarán a operar severamente sobre aquellos factores sociales que determinan la calidad de la salud en el planeta y particularmente en aquellos países que; como el nuestro, tienen una economía abierta y dependiente de la venta de materias primas sin elaboración, cuya depreciación será cada día mayor.

Nos encontramos en una crisis de marca mayor, sólo comparable con la gran crisis de los años 30, con las consecuencias de similar o mayor gravedad, previéndose la posibilidad de aparecimiento de una hambruna gigantesca.

Ello obliga, para encontrar salidas dotadas de un mínimo de equidad, que el Estado cumpla su tarea tendiente a resguardar los derechos humanos y sociales esenciales de la población y su énfasis debe estar orientado a esos fines, Pan Techo y Abrigo se decía en períodos de la crisis que precedentemente indicáramos, cuestiones imprescindibles para garantizar la Salud, comprendida como el goce del bienestar pleno.

Para ello resulta del todo insuficiente la reasignación presupuestaria implementada desde La Moneda, como tampoco lo hacen las medidas paliativas ¿orientadas? a los sectores más vulnerados por los efectos que la implementación a ultranza del modelo neoliberal.

No basta desarrollar una agenda pro empleo que lo único que hace es fortalecer a los mismos grandes conglomerados económicos, muchos de los cuales no han trepidado en modificar las condiciones contractuales de sus trabajadores, amparados en la Ley de Protección del Empleo, reduciéndose así los ingresos de quienes generan su riqueza y acaparando para sí los recursos que desde el gobierno se colocan a disposición de la reactivación de la economía.

Es la hora de modificar la política económica y comenzar con políticas contracíclicas que permitan mejorar la liquidez de los más desposeídos, como de los asalariados de los segmentos más bajos de esa mal definida clase media, acudiendo al tesoro del Estado y a la capacidad de endeudamiento al que, como nación tenemos; con la finalidad de aportar esta vez al desarrollo nacional y no al crecimiento del enriquecimiento de los menos que se apropian de los frutos de la producción nacional.

Fuentes internacionales, de alta credibilidad indican que en nuestro país la economía decrecerá entre un -4% y un -5%, es decir, si se suma la expectativa de crecimiento, el ¿país? “crecería” menos de un 7%, ello es lo que obliga a la adopción de las medidas que hemos indicado.

De lo contrario, seremos los trabajadores quienes pagaremos las consecuencias de la crisis, y de los provocados por la dura realidad económico social que afecta a nuestro pueblo y que la pandemia ha permitido percibir en toda su cruda realidad, en los mismos términos indicados durante las prolongadas manifestaciones de fin de año pasado que, manifiestamente ponen en riesgo la salud y la vida de la población, en el entendimiento que su condición indivisible.

NUESTRO COMPROMISO CON LA SALUD

Esa es la razón que hemos tenido a la vista cuando definimos "La Salud como una cuestión de Seguridad Nacional" la que después de más de 9 años se asume por la CUT; y con ello estamos poniendo en el centro la capacidad de análisis que como organización hemos desarrollado.  Pero lo hemos dicho, asumimos este concepto separándonos de la mirada generada bajo el concepto de “guerra de baja intensidad”, por el contrario, lo vemos desde la perspectiva integradora que la función de la Salud tiene en la sociedad. Como un valor que integra las miradas diagnósticas de los problemas y unifica rutas de salida o solución de estos.

La autoridad ha venido asumiendo una concepción autoritaria aberrante, cercenando caminos a la información e inhibiendo que desde regiones se adopten decisiones que se desmarquen del errático comportamiento que ha mostrado la autoridad central, no por una visión regionalista sino eminentemente epidemiológica.

Hemos estado durante años centrando el quehacer en el cumplimiento de metas que hacen el remedo de ser metas sanitarias al decir que engarzan con la Estrategia Nacional de Salud, que, de lo que evidentemente carece, es de una mirada integral de salud que ponga el acento en la prevención, la educación, la promoción y la fiscalización, antes que cuestiones meramente administrativas o de números que no expresan el impacto de ellas en la salud de la población.

LA PANDEMIA, UNA RADIOGRAFÍA SOCIAL

La realidad que desnuda la pandemia es que nuestro sistema carece no sólo de herramientas de intervención en el modo que la sociedad se organiza, produce y se reproduce, y de la forma que esto impacta en el acceso al bienestar pleno de la población, sin lo cual ninguna actividad de servicios o productiva puede garantizarse. Esta es la amplia mirada a la que invita el enfoque de las Determinantes Sociales de Salud. Que rescatamos de manera intransable y que coloca primero la vida, luego la economía.

La pandemia ha demostrado que cuando los trabajadores no pueden concurrir a su trabajo, los sectores poseedores ven amenazados sus privilegios derivados de la producción mercantil y la realización del producto de trabajo asalariado, y de la provisión de servicios que la haga posible, dejando explícitamente claro quiénes son los generadores de riqueza.

 

POR EL CAMINO DE LA DESOBEDIENCIA

Nos enfrentaremos a la obligación de estar en la trinchera de la salud para proveerla. Cuando desde la Moneda se está pensando en la llamada “Nueva Normalidad” o en el “Retorno Seguro” no se está considerando como se mueven las variables de la pandemia, hecho que las cifras evidenciadas durante la última semana demuestran que estábamos en lo cierto, que las entregadas inicialmente eran solamente la punta de iceberg, cuyas dimensiones aún desconocemos. Es ese manejo errático e improvisado, con desmentidos y cambios de giro contradictorios, lo que nos obliga más que nunca a propender a la movilización nacional en defensa del bienestar de la población. Esta lucha resulta estrictamente necesaria para defender los derechos, tanto los que tenemos como trabajadores, como los del resto de la población.

Está llegando la hora de confrontar a la autoridad que está pensando más en un extemporáneo programa de gobierno que en el desarrollo y fortalecimiento de Políticas de Estado, que tengan permanencia en el tiempo y que apunten a modificaciones estructurales que admitan otear un mañana mejor, a través de una nueva Constitución que implique un nuevo y mejor trato para las grandes mayorías sociales, en términos expresados en las masivas movilizaciones sociales realizadas en octubre o el 8M y que invitan a la generación de un nuevo Estado. Ello nos lleva a proponer el camino de la Desobediencia Activa que se puede expresar de múltiples formas, como ejemplos, iniciales, autoconfinamiento en lugares con brotes donde no se haya decretado cuarentena, no concurrir al Mall, hacer compras en farmacias y negocios de barrio, pegatinas de letreros que manifiesten el descontento con el modo con que se enfrentado la pandemia en ventanas y rejas, “acciones de arte” o intervenciones en plazas o lugares emblemáticos, en barrios, ciudades, provincias o regiones.

Es en esta lucha donde se probará la consecuencia, el valor y el sacrificio de cada Dirigente, Trabajador y Trabajadora por un Chile mejor. Es la hora de transitar desde la Declaración a la Acción, desde la Propuesta a la Protesta.

LORENZO GONZÁLEZ CABRERA

VICEPRESIDENTE FENFUSSAP


"Desobediencia Laboral Sanitaria"¡¡¡Ahora!!!

 

Mayo 4 de 2020

Post Scriptum: Si deseas suscribirlo eres bienvenido.

Nota de la redacción:


Sólo un gobierno popular asegura el derecho a la salud en forma integral, para toda la población, venciendo las barreras sociales, la discriminación, la falta de oportunidades. Sólo la caída del capitalismo nos asegura un sistema social justo, conforme a la dignidad del ser humano.


viernes, 17 de abril de 2020

CARTA A ANA GONZALEZ DE RECABARREN ANTE EL FALLO DE LA CORTE DE APELACIONES DE SANTIAGO


Querida Ana:


Nos conocimos hace mucho tiempo, allá, por los años 78, en casa de Clotario Blest, donde, junto a Sola Sierra, Magdalena Navarrete, Doris Meniconi, Gala Torres, Victoria Zúñiga, Viviana Díaz (en esa época, muy joven aún) y muchos otros familiares de aquellos compañeros nuestros apresados y, luego, desaparecidos, habías organizado la Agrupación que había de representarlas a todas Uds. en los años venideros para librar una lucha que aún no termina. Eran años difíciles esos, Ana, ¿recuerdas? Intentar sobrevivir y, a la vez, reclamar por los derechos amagados, por intentar sobrevivir, por soñar aún con una sociedad mejor, por exigir la libertad de nuestros amigos y familiares presos, por soportar capturas y apremios ilegítimos… No, no era una tarea fácil vivir en esos años. Y, sin embargo, nunca decaímos; ni, menos aún, desfallecimos. Teníamos la certeza que, tarde o temprano, lograríamos nuestros objetivos, que la justicia se impondría una vez más e, incluso, que volveríamos a tener la vida que una vez tuvimos. Ilusos.




No tengo memoria de las veces en que volvimos a encontrarnos, más tarde, en actos culturales, peñas, manifestaciones, protestas, de la mano de las organizaciones sociales, y desafiando a la dictadura, a la misma que hoy rinden homenaje quienes gobiernan el país. Los años no pasan en vano, tal vez porque no son ellos quienes pasan sino somos nosotros, seres humanos que se agotan en el transcurrir. La última vez que nos vimosrecuerdo fue con motivo del fallecimiento de nuestro común buen amigo y compositor Richard Rojas, músico insuperable, hombre lleno de vida, autor de una de las más bellas canciones creadas para rendir homenaje a quienes una caterva de degenerados hizo desaparecer en medio de los más crueles tormentos. Me refiero al tema ‘¿Dónde están?’ Richard Rojas, de profesión maestro, había organizado junto a Ester González, su mujer (la ‘Esterciña’, como la llamaba), y el maestro Jorge Sepúlveda, primero, el ‘Trio Lonquimay’; luego, el ‘Trío Lonqui’; finalmente, el ‘Duo Lonqui’ (integrado solamente por él y su mujer). Desde esa instancia, tan de ellos, nos entregaban, periódicamente, obras de innegable valor cultural de las que recuerdo con gran cariño la ‘Resbalosa del pan’ y la canción ganadora del Festival de Olmué dedicada a la minga de Chiloé que cantara con dedicación y arte nuestra otra gran amiga Rebeca Godoy. Pero, ya en esos años, cuando nos saludamos al vernos, al retorno del sepelio, en una de las avenidas del Cementerio General, ya no me recordabas. Era demasiado el tiempo transcurrido. Y la distancia no tiene conmiseración, asfixia con su abrazo intolerable. Luego, vino la separación definitiva, el tiempo de la despedida, ‘la hora de decir adios’.
Trío-Lonqui
TRÍO LONQUIMAY. Rubén Cortez, Ester González y Richard Rojas

Tras años de peregrinar, en vano, buscando a los tuyos, tras años de esperar el retorno imposible de Manuel Segundo Recabarren Rojas (tu marido), de Manuel Guillermo Recabarren González (hijo tuyo), de Luis Emilio Recabarren González (también tu hijo) y de Nalvia Rosa Mena Alvarado (tu nuera), vino lo inevitable: tu desaparición, tu despedida, allá, en la casa tuya, en la zona Sur, en esa casa donde viviste los años más felices y más desgraciados de tu vida, la misma donde el vecindario, personas como yo, y muchos artistas y personajes llegamos a rendirte un último homenaje.

Te preguntarás por qué te escribo, Ana, en estos momentos. Y tienes razón en hacerlo. No te sorprendas, por favor, si te digo que lo hago para pedirte disculpas. Porque, luego de conocer la sentencia de la Corte de Apelaciones de Santiago, que rebajó la pena aplicada a esa caterva de desalmados que asesinaron a casi la totalidad de tu familia, pienso que te he fallado. A pesar que nada tengo que ver con ese hecho, pienso que te he fallado. Y es que mis actos, mis desplazamientos, mis pequeñas obras, mis análisis, mis debates y conversaciones, intentando convencer a una sociedad sorda sobre infinidad de hechos y circunstancias, de nada han servido todos estos años. Pienso que también les he fallado a los familiares de las agrupaciones de derechos humanos (presos políticos, detenidos ejecutados, detenidos desaparecidos, exiliados) porque no he hecho lo suficiente por ellos. Y quiero pedir disculpas. Pedírtelas a ti, en primer lugar, Ana; luego, a todos los demás. Y es que no he podido cumplir conmigo mismo, con los objetivos que me impuse; menos, aun, cumplir con los demás.

Estudie, una vez, las leyes de la Física para convencerme que la realización de un acto es directamente proporcional al grado de fuerza (poder) con que se cuenta. Eso me ha permitido encontrar una explicación a mis yerros. No he contado con la fuerza que se requiere para llevar a cabo las transformaciones que pudieron servir para ese cometido; he sido incapaz de agrupar voluntades para llevar adelante esos propósitos. Quise hacer muchas cosas, pero no tuve la fortaleza de llevarlas a cabo. Y es que menosprecié el poder de las clases que dominan porque no conocía su naturaleza. Casi al fin de mi vida he podido encontrar una explicación probable de ello. Por eso te escribo. Para pedirte disculpas por no haber cumplido lo que me propuse alguna vez. Porque, aunque tú jamás lo hubieses sabido, me propuse conseguir justicia para ti y para los tuyos. Pero ignoraba que la ‘justicia’ era una entelequia’ y que ya Aristóteles, Ulpiano, Augustinus, Thomae Aqvinatis, nos habían advertido que ‘justicia’ es, solamente, ‘dar a cada cual lo que le corresponda’ y que al pobre y al esclavo sólo le corresponden latigazos y miseria. Eso es justicia. Fallé, en consecuencia. Y me avergüenzo de ello. Por eso te pido disculpas. Porque tu marido, tus hijos y nuera, han sido, una vez más, burlados. Y yo no he sido capaz de evitarlo. Te he fallado tanto a ti y a tu familia como lo he hecho con los demás.

La Corte de Apelaciones de Santiago, que integran severos doctores de la ley poco proclives a la lectura de los expedientes que se les entregan, dio a conocer la semana pasada, una resolución que reduce la pena aplicada por sentencias anteriores y absuelve (en otros casos) a quienes quitaron la vida a tus seres queridos haciendo superfluos sus execrables actos. No nos sorprendamos, querida Ana. Porque los tribunales, desde el momento mismo en que se produjo el golpe de Estado en 1973, se alinearon servilmente con los dominadores. Fue su presidente, Enrique Urrutia Manzano, quien terció, sobre el pecho de Pinochet, la banda tricolor que lo ungía como gobernante supremo de la nación. Sí, mi buena Ana, los tribunales, los mismos a las rejas de cuyo inmueble de calle Bandera te encadenaste junto a muchas otras, acompañadas de Clotario Blest. Esos mismos tribunales cuyo presidente (Israel Bórquez) decía estar ‘curco’ de tanto recibir recursos de amparo presentados por la Agrupación que fundaste. Esos mismos tribunales, siempre generosos con la sangre ajena y tremendamente avaros con la propia. Los mismos que se han negado a rebajar sus sueldos luego del estallido social de 18 de octubre pasado y aceptan, sin embargo, que otros lo hagan. Los mismos que crucificaron (como funesto presagio de la Semana Santa) a Daniel Urrutia, uno de los pocos jueces que, compadecido por la suerte que espera a los presos políticos en las tenebrosas cárceles de la ‘democracia’—, frente a la pandemia que asola a nuestro país, se atrevió a desafiar la omnipotencia de la justicia chilena decretando la libertad de todos ellos. Sí, querida Ana: la misma Corte, los mismos jueces, los mismos que mantienen vínculos estrechos con las clases dominantes y, por ende, con quienes gobiernan el país y que, ante la prensa extranjera, no escatiman alabanzas a la tan cacareada ‘independencia’ del Poder Judicial chileno. La misma Corte que hoy revoca la sentencia de otra jueza para volver a encarcelar a los generosos jóvenes de la Primera Línea. Esos mismos tribunales que obligaron, en plena democracia, a arrancar del país a la periodista Alejandra Matus luego de la publicación del libro ‘El libro negro de la Justicia chilena’, documento magistral, que puso al desnudo la esencia del Poder Judicial. Porque esa es la verdadera naturaleza de quienes han dirigido nuestra débil democracia desde su advenimiento en 1990. Por lo mismo, ¿podrías suponer un comportamiento diferente, en una persona tan poco decente como lo es el ex presidente Lagos, generoso, también, con la sangre ajena y tremendamente tacaño con la propia?

He querido enviarte esta carta, Ana, a fin de justificarme por ser débil, tremendamente débil y vulnerable. Por ser la antítesis del superhombre o del héroe que presentan las historietas y las películas de ciencia ficción; por ser uno más de los innumerables seres anónimos que recorren el país mascullando, en su soledad, improperios contra quienes gobiernan muchos de los cuales son ignorantes, débiles mentales o sujetos abiertamente perversos y ejecutan a cada instante, a cada momento, actos orientados únicamente a mantener doblada la cerviz de nuestras clases oprimidas, mientras ellos se apoderan de los escasos bienes nacionales que van quedando.

Termino, querida Ana, confesándote, además, que me siento avergonzado de la institucionalidad que existe en la nación que habitamos, tan ajena y distante de nosotros, de la nación que nos arrebataron, de sus capataces y mayordomos, de todo el aparataje institucional que se nos ha impuesto como herencia de un pasado que nos agobia. Me dan vergüenza los Tribunales del país, me da vergüenza su Parlamento, la Presidencia en manos de un demente con colaboradores que en poco difieren de él. Me consuela, sin embargo, decirte que no te he traicionado ni he traicionado a quienes cayeron en la lucha, como tus familiares, por construir una sociedad mejor. Siempre he estado en contra de esa institucionalidad; siempre la he querido cambiar. Pero no solo, ni con los partidos políticos actuales sino de la mano de una comunidad organizada, capaz de llevar adelante las transformaciones esenciales que el país necesita. Por eso, también, jamás fui parte de los gobiernos post dictatoriales cuya única labor fue desactivar el funcionamiento de todos los movimientos sociales que existían al comienzo del retorno de la democracia.



Y, por lo mismo, hoy, a pesar de todo, tengo confianza en el futuro de Chile; pero tengo, también, temor de lo mismo pues las tareas que esperan a la comunidad nacional al término de la pandemia son colosales. Los ricos querrán mantener sus privilegios, al igual que todo el estamento dominante: militares, marinos, policía, jueces, empresarios, agiotistas, banqueros, especuladores. Una dura prueba espera al pueblo de Chile luego de esta pandemia. Porque fácil resulta entender que, en estos momentos, nada más se puede hacer: Cuando una tragedia, como la del Covid 19, asola a una nación, el primer deber de los movimientos sociales que se han alzado para reclamar por sus derechos es sobrevivir y lograr que todos sus integrantes también lo hagan. Hay, en consecuencia, tiempo para pensar, tiempo para meditar sobre un futuro mejor; y, cuando ese tiempo existe, lo hay, también, para preparar lo que esa tarea demanda. Por lo que puede suponerse que no todo está perdido. Como tan brillante lo expresa ese refrán chileno: mientras hay vida, hay esperanza. Y, te lo aseguro, somos muchos los que no hemos perdido aún esa esperanza.

Un abrazo enorme, allá, en la eternidad.

Manuel

Santiago, 13 de abril de 2020


#CODEHS, #Dictadura #Gobierno_de_Piñera #Derechos_Humanos #Violaciones_a_los_Derechos_Humanos_en_Chile #Impunidad #Chile_Despertó
#COVID19 #Corona_Virus #Injusticias_en_Chile #Ana_González #Clotario_Blest

ENLACES RELACIONADOS:





LIBERTAD A LOS PRESOS POLÍTICOS DE LA PROTESTA:



miércoles, 1 de abril de 2020

Codehs apoya a Dirigentes del SML desvinculados por ejercer su rol sindical

Este lunes, poco más de una decena de trabajadores del Servicio Médico Legal (SML) volvió del fin de semana largo para encontrarse con el resultado de un sumario administrativo ordenado en enero, durante las movilizaciones que los funcionarios realizaron en Santiago. ¿El resultado? Sanciones económicas para alguno, suspensiones para otros y la destitución de su cargo para tres dirigentes. 
Entre los sancionados están Rosa Cerda, de la asociación nacional de trabajadoras y trabajadores de SML; Lucía Carrasco, de la asociación regional metropolitana y José Morales, de la asociación nacional de funcionarios. 
El sumario en cuestión fue encargado por el director del SML y la Subsecretaría del Ministerio del Interior el 17 de enero de 2018, en medio de las movilizaciones que los trabajadores realizaron durante ese mes para pedir, entre otros puntos, la desvinculación de Franklin Santibáñez, por entonces jefe de gabinete del actual director del servicio, Gabriel Zamora. 
Los resultados del sumario entregados este lunes –al que The Clinic tuvo acceso- concluían que los dirigentes habían incurrido en la “omisión de realizar sus funciones habituales” durante la movilización, transgrediendo así los principios de “desempeñar personalmente el cargo” y “realizar sus labores con esmero, cortesía, dedicación y eficiencia”. 
Además, el documento condenó la acción de “organizar o pertenecer a sindicatos en el ámbito de la administración del Estado” –los tres dirigentes pertenecen a organizaciones gremiales, es decir, no a “sindicatos”- y el “promover o participar en huelgas”
Los demás funcionarios, en tanto, fueron sancionados con la disminución de su sueldo en distintos porcentajes durante dos meses. Los documentos llevan la firma del director Zamora.  

“Es una persecución”
Para parte de los trabajadores del SML de Santiago, las medidas adoptadas este lunes corresponden a una “persecución”. — Si en las asambleas participaron 250 funcionarios auto convocados, entonces, ¿por qué se escogió a ciertas personas para sancionar? —, se pregunta una trabajadora del servicio, presente en las movilizaciones de enero. Para ella, esta situación correspondería a una “práctica antisindical”. “La movilización es un derecho que todos los trabajadores tienen. Y el tiempo nos dio la razón, porque con los meses sí destituyeron a Franklin Santibáñez”, dice.
Franklin Santibáñez, quien llegó al servicio bajo la dirección de Juan de Dios Reyes en 2017, estuvo encargado de llevar adelante un “proceso de modernización” al interior del SML, el cual dejó inconformes a los funcionarios. “¡Tenía asignación profesional, pero sólo tiene un bachiller en teología de una universidad gringa!”, se queja otra de las trabajadoras actuales del SML. 
En efecto, Santibáñez ha contado con varios puestos de “asesor” a lo largo de su vida, y su domicilio político ha pululado por casi todos los partidos de la exConcertación. Incluso, recientemente se transformó en una pieza clave que vincularía a Javiera Blanco en las investigaciones que Fiscalía dirige sobre el funcionamiento del Sename, particularmente en la arista Ascar. Parte de los trabajadores sancionados, consultados para este artículo, declararon a The Clinic que durante enero el SML “nunca estuvo cerrado”, como lo aseguró el director del servicio. — No todos los funcionarios participaron de la movilización y, antes de realizarla, nos preocupamos de despachar todos los cuerpos que habían ingresado. Es falso que nos hayamos negado a atender público—, asegura una de las dirigentes sancionadas. 
Ahora, queda una instancia de apelación para los dirigentes sancionados. Aun así, los ánimos al interior del SML están crispados. “Nunca, en la historia de este servicio se habían aplicado estas sanciones”, concluye otra de las trabajadoras. 


La presente nota del diario The Clinic, que relata con veracidad, precisión y sensibilidad lo acaecido en este servicio público, perteneciente al Ministerio de Justicia, dirigido por el momio recalcitrante: Hernán Larraín Fernández, perteneciente a la vetusta pero pegajosa oligarquía chilena. No obstante, en esta oportunidad, el causante directo de la atroz práctica antisindical, refrendada con la toma de razón de la Contraloría General de la República, es un operador político transversal llamado Franklin Santibañez, que ha pululado en diversos cargos públicos en una infinidad de instituciones, sin guardar ningún escrúpulo o lealtad real, ya que su vida funcionaria ha transcurrido tanto en gobiernos de derecha oligárquica como en gobiernos de concertación, siendo ésta su cuna inicial.



Más allá, de los personajes y nombres propios involucrados en este triste capítulo del sindicalismo chileno, es menester destacar la grosera vulneración de los trabajadores y sus dirigentes a realizar acciones de fuerza, toda vez que las negociaciones se ven agotadas con sus respectivas autoridades. Nuestra actual constitución (que tiene fecha de vencimiento), limita la actividad sindical de los funcionarios públicos, cercenando dos de los derechos fundamentales asociados a los derechos humanos de segunda generación, y en especifico relacionado con el trabajo: la negociación colectiva y la huelga, ésta última es ampliamente repudiada por leyes de menor jerarquía como la ley de bases general de la administración del Estado y el nefasto estatuto administrativo, incluso es más, la ley de seguridad interior del Estado, faculta a las autoridades de turno, a perseguir incluso penalmente cualquier actividad que consideren impropia para un trabajador público o dirigente sindical.



Este verdadero "jaque" que se ha endosado al movimiento de trabajadores, es de tal magnitud que podría dejar totalmente inmovilizados a los funcionarios públicos, ya que cerca del 70% de la dotación de la Administración Central del Estado se encuentra en calidad a "contrata", es decir, cuyos contratos de trabajo (nombramientos) tienen una duración de 12 meses y que pueden ser interrumpidos por el sólo "ministerio de la ley", si a esto sumamos, que todo dirigente gremial queda a merced del criterio de sus autoridades para ser condenados con la desvinculación por "por promover o participar en huelgas", prácticamente estaríamos frente al capítulo final del sindicalismo del sector público, siempre glorioso y con una tasa promedio de sindicalización cercana al 70%.



De todos los dirigentes del sector público, depende que que este "jaque" no se transforme en un "jaque mate" para el movimiento de trabajadores, y muy por el contrario, apenas salgamos de la presente "peste" que nos aplasta, seamos los trabajadores, los que pongamos jaque mate al gobierno de la derecha oligárquica de Sebastián Piñera E.





El Estado de Chile vulnera los tratados internacionales 87 y 98 de la OIT, firmados y ratificados por Chile, que por su origen en el sistema internacional de las Naciones Unidas tienen valor de ley en este país.

La Anef, fundada por Clotario Blest Riffo en 1943 y el Comité de Defensa de DDHH y Sindicales, condenan y llaman a la rebelión civil frente a esta grosera vulneración de derechos sindicales, única forma en que los trabajadores pueden equilibrar la relación de poder entre patrón (autoridad) y trabajador.




Felipe Tamayo F.

Pdte. Asociación Nacional de Profesionales y Técnicos Universitarios de Fonasa


Secretario General de Codehs - Clotario Blest Riffo


#CODEHS
#Protesta_social
#Rebelión_Popular

jueves, 31 de octubre de 2019

DECLARACIÓN - EXIGE RENUNCIA DEL PRESIDENTE


DECLARACION
EXIGE RENUNCIA DEL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA



El COMITÉ DE DEFENSA DE LOS DERECHOS HUMANOS Y SINDICALES CODEHS, a la opinión pública nacional e internacional declara:

Ha finalizado exitosamente el último llamado a protesta nacional, autoconvocado por las organizaciones sociales e iniciado el 18 del presente, luego de la convocatoria que hicieran los estudiantes del Instituto Nacional a objeto de evadir el pago del transporte en el Ferrocarril Metropolitano METRO. Durante estos días, esta organización ha podido, no obstante, observar los siguientes hechos:

1. Fuerte incremento en la violación de los derechos humanos por parte de las Fuerzas Armadas y de Orden, con vejámenes, torturas, lesiones, desaparición de personas y, en algunos casos, disparos o atropellos con resultado de muerte;
2. Actos de dudosa procedencia cometidos por  algunos manifestantes en contra de locales comerciales y bienes de propiedad fiscal, algunos como expresión de la rabia y frustración que afecta a la inmensa mayoría de la población nacional, otros cuya comisión merece ser seriamente investigada;
3. Participación creciente de diversos estratos de la sociedad civil en las protestas, síntoma inequívoco del descontento social que atraviesa verticalmente a toda la sociedad; y
4. Aumento significativo de las demandas sociales y extensión de las mismas a todos aquellos ámbitos de la vida nacional que les fueron negados a los chilenos desde el advenimiento de la democracia post dictatorial, expresado en la frase “No son 30 pesos lo que nos convoca, sino 30 años de violación sistemática de nuestros derechos”. Los chilenos que se manifiestan no lo hacen por el alza del pasaje del METRO sino por infinidad de demandas cuya solución implica la realización de profundos cambios en la sociedad.

El CODEHS considera que el presidente de la República, de quien emanó la orden de responder con las armas a una protesta cuya solución pudo haberse alcanzado a través de la discusión y del diálogo, debe hacer pronto abandono de su cargo; porque es él único y directo responsable de los hechos mencionados. Quien demuestra tan torpe proceder no es  interlocutor válido para cualquier negociación posible; no lo son sus ministros cuyos exabruptos recorren hoy las redes sociales ni basta un cambio de los mismos, como ya ha sucedido, cuya finalidad no es otra que la reafirmación de la institucionalidad vigente. El CODEHS sabe que la estrategia de La Moneda se afirma en el eventual desgaste del movimiento social, estrategia que, de no resultar, puede derivar en una sangrienta masacre. Por lo mismo, solicita al Sr. Presidente la pronta entrega de su cargo a quien corresponda, bajo la condición que este último convoque, a la brevedad, a la nación a elecciones presidenciales libres, secretas e informadas y a la conformación de una Asamblea Constituyente en donde estén debidamente representados los intereses de las mismas organizaciones sociales que han validado la protesta como expresión del descontento.

Por el COMITÉ DE DEFENSA DE LOS DERECHOS HUMANOS Y SINDICALES CODEHS


Raúl Elgueta González                                                                   Manuel Acuña Asenjo
     Presidente                                                                                     Secretario General

Santiago, octubre de 2019

sábado, 27 de octubre de 2018

FALLECIMIENTO ANA GONZÁLEZ DE RECABARREN


codehs chile______________________________

comité defensa derechos humanos y sindicales
(fundado por CLOTARIO BLEST RIFFO en 1970)




DECLARACION PUBLICA

FALLECIMIENTO
ANA GONZALEZ DE RECABARREN.

El Comité de Defensa de los Derechos Humanos y Sindicales CODEHS, a la opinión pública nacional e internacional, declara:

El día de hoy, en la madrugada, en una de las salas del Hospital San José, ha fallecido una de las más extraordinarias luchadoras por los Derechos Humanos de este tiempo. Nos referimos a Ana González González, más conocida como Ana González de Recabarren.

Aquejada los últimos días por lo que se ha descrito como ‘una compleja situación de salud’, había buscado ser atendida en uno de los recintos de salud pública siendo derivada por el Hospital Barros Luco al centro hospitalario en donde finalmente falleció tras sufrir una serie de complicaciones.

En la figura de Ana González se condensa la trágica historia de las familias que fueron víctima de la detención y posterior desaparición de sus seres queridos. Luis Emilio Recabarren González, uno de sus dos hijos, había sido detenido junto a su mujer, Nalvia Rosa Mena Alvarado, embarazada de tres meses, el 29 de abril de 1976. Cuando su marido, Manuel Segundo Recabarren Rojas, junto a Manuel Guillermo, el otro hijo suyo, y su nieto (Luis Emilio), de dos años, fueron a reclamar por la detención de la pareja, fueron también aprehendidos; todos ellos figuran hoy como detenidos desaparecidos con excepción del pequeño Luis Emilio, que pudo regresar al hogar.

Ana González fue una figura emblemática en la defensa de los DDHH. En numerosas oportunidades pudimos compartir con ella y conocer de su fortaleza y compromiso. Eran los años en que muchas de las organizaciones de Derechos Humanos se reunían en casa del fundador de nuestro Comité Clotario Blest.

Muere Ana Gonzalez, como muchas otras personas que sufrieron los rigores de la dictadura, castigada por la indolencia de los uniformados, sin alcanzar a recibir justicia, sin saber el destino que tuvo su familia en manos de los militares chilenos, si están vivos o muertos y si están vivos, dónde se encuentran o, si están muertos, donde pueden ser descubiertos sus cuerpos, y qué pudo suceder con esa criatura que debió nacer hace 40 años. Como muchos otros, muere Ana, además, castigada por la indolencia de los gobiernos post dictatoriales cuyos representantes buscaron solamente ocupar los cargos de gobierno que codiciaban sin importarles la suerte que pudieron correr las víctimas de la dictadura.

El CODEHS le rinde su más sentido homenaje a esta extraordinaria luchadora, a su familia y a la Agrupación de Familiares de Detenidos desaparecidos. Honor y gloria a quienes, como ella, son capaces de mostrar un modelo de perseverancia, tenacidad y compromiso.

COMITÉ EJECUTIVO NACIONAL

Santiago, 26 de octubre de 2018

viernes, 19 de octubre de 2018

Sobre LIBERTAD CONDICIONAL PARA OTRO REO DE PUNTA PEUCO (declaración pública)

codehs chile______________________________
comité defensa derechos humanos y sindicales

(fundado por CLOTARIO BLEST RIFFO en 1970)


DECLARACION PÚBLICA
LIBERTAD CONDICIONAL PARA OTRO REO DE PUNTA PEUCO

El Comité de Defensa de los Derechos Humanos y Sindicales CODEHS, a la opinión pública nacional e internacional, declara:

Una vez más, la Sala en lo Penal de la Corte Suprema, integrada por los MINISTROS CARLOS KÜNSEMÜLLER, HUGO DOLMESTCH Y MANUEL VALDERRAMA ha otorgado la libertad condicional a otro de los presos del penal Punta Peuco haciendo, con esa medida, inaplicable la aplicación de la pena por violación de los derechos humanos. Esta vez se trata del coronel de ejército LANDER URIARTE BUROTTO, de 81 años de edad quien cumplía condena en el referido centro de reclusión por su participación en el secuestro y posterior desaparición de los ciudadanos uruguayos ARIEL ARCOS LATORRE, JUAN POVASCHUCK GALEAZZO Y ENRIQUE PARGADOY SAQUIERES,  que, huyendo de la persecución contra ellos en Argentina, fueron capturados por la policía fronteriza en la zona cordillerana y entregados al Ejército.
Esta nueva resolución del más alto tribunal de nuestro país no puede sorprendernos. Ya lo habíamos señalado en nuestra declaración de fecha 31 de julio del presente año, en relación a la libertad concedida a otros siete reos del referido penal, cuando afirmábamos:

“Que este fallo crea jurisprudencia no cabe la menor duda. Lo ha reconocido el propio magistrado integrante de la respectiva sala, Hugo Dolmestch, cuando, refiriéndose a lo que puede acontecer respecto de otros casos, ha dicho a los medios de comunicación que ‘lo más probable es que se aplique la misma decisión’”.

Con esta nueva sentencia, la aberración jurídica que había de convertirse en jurisprudencia, iniciada hace tres meses atrás, se consolida; hace, al mismo tiempo, inútil todo intento de poner fin las violaciones de derechos humanos a la vez que estéril cualquier clamor por justicia. Chile se convierte en el país del crimen impune y su más alto tribunal, la Corte Suprema, recobra su rol de legitimadora de una dictadura como lo hizo en 1973. La libertad para quienes cometen crímenes de lesa humanidad pasa a ser conveniente para la sana convivencia nacional, reservándose las cárceles para quienes cometen delitos contra la propiedad, siempre y cuando sean de escaso monto; porque los que roban a destajo también van a gozar de la impunidad. Tal es la nueva concepción de la justicia que pretende instaurar en Chile.

El Comité de Defensa de los Derechos Humanos y Sindicales CODEHS llama a todas las organizaciones sociales, sindicales y de derechos humanos a exigir del Parlamento y del Gobierno la dictación de normas que aseguren ejemplares penas a quienes violen los tratados internacionales —en especial, la Declaración de los Derechos Humanos de la ONU—, sean éstos jueces, autoridades religiosas, civiles o militares. Al mismo tiempo llama a esas mismas organizaciones a estar alerta para movilizarse ante cualquier maniobra que pretenda hacer tabla rasa de sus legítimos derechos.

COMITE EJECUTIVO NACIONAL

Santiago, 12 de octubre de 2018

domingo, 7 de octubre de 2018

¿ASESINATO O SUICIDIO? LA MUERTE DE ALEJANDRO CASTRO


DECLARACIÓN PÚBLICA



codehs chile____________________________________
comité defensa derechos humanos y sindicales
(fundado por CLOTARIO BLEST RIFFO en 1970)





¿ASESINATO O SUICIDIO? LA MUERTE DE ALEJANDRO CASTRO

El día jueves 4 del presente, en horas de la madrugada, personal del Metro de Valparaíso MERVAL encontró colgado del cinturón de su propia mochila, en una reja emplazada a un costado de la vía férrea, en la intersección de la Avenida Errázuriz con calle Carrera, sector de El Almendral, de Valparaíso, el cuerpo sin vida de ALEJANDRO CASTRO, Secretario del Sindicato de Pescadores S24 de Quintero (27 años según algunas publicaciones, 30 según otras).

De acuerdo con las versiones entregadas por la Policía de Investigaciones PDI, la causa de la muerte del dirigente a quien apodaban cariñosamente ‘El Mecha’, fue asfixia por estrangulamiento, atribuida a un probable ‘suicidio’, tesis que nuestra organización, al igual que las redes sociales, pone en duda. Alejandro se había destacado como un activo dirigente en las protestas que la comunidad de Quintero y Puchuncaví ha estado organizando en contra de las llamadas ‘Zona de Sacrificio’ y, por consiguiente, en contra de las empresas que han contaminado el sector de Quintero y Puchuncaví. 

Nuestra organización sostiene que no comete suicidio un dirigente que regresa de una exitosa manifestación de apoyo por la recuperación de las zonas contaminadas en la ciudad de Valparaíso. Menos aún, un dirigente que había sido amenazado de muerte por su labor sindical a través de comunicaciones anónimas.

El caso de Alejandro Castro guarda asombrosa similitud con el ‘suicidio’ de la dirigente mapuche MACARENA VALDÉS ocurrido en el sur del país el 22 de agosto de 2016, cuando ella encabezaba la lucha contra las empresas madereras. También esa dirigente fue encontrada sin vida, colgada, en una posición que aparentaba un eventual ‘suicidio’. Al igual que Alejandro, Macarena había sido amenazada de muerte varias veces a través de llamadas anónimas.

El Comité de Defensa de los Derechos Humanos y Sindicales CODEHS, junto con denunciar estos graves hechos y enviar sus palabras de condolencias y solidaridad tanto a la familia como a los compañeros de trabajo de Alejandro, levanta su voz para exigir del Gobierno el total esclarecimiento de estos hechos como asimismo el de la joven dirigente Macarena Valdés. No podemos aceptar la tesis que nuestros dirigentes sindicales y sociales se estén ‘suicidando’ como parece estimarlo los organismos policiales y de investigación.

CONSEJO EJECUTIVO NACIONAL

Santiago, 5 de octubre de 2018

miércoles, 12 de septiembre de 2018

DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS DEL CODEHS


DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS DEL CODEHS


INTRODUCCIÓN

El CODEHS, como lo indica su nombre, es la sigla que identifica al Comité de Defensa de los Derechos Humanos y Sindicales. Creado en 1970 por el sindicalista Clotario Blest Riffo, desde la fecha de su fundación ha desarrollado su labor orientado por un conjunto de principios que son los que indican a continuación:

1.      Independencia.
2.      Autonomía.
3.      Cooperación.
4.      Solidaridad.
5.      Laicidad.
6.      Diversidad.
7.      Universalidad.
8.      Ecologismo.
9.      Internacionalismo.
10.  Colectivización.
11.  Horizontalidad.

Contenido y significado de esos principios.
Los principios indicados más arriba requieren de una breve explicación. A continuación, se entregan algunos conceptos que pueden aclarar su contenido y significado para evitar interpretaciones erróneas.

1.- Independencia.
Que el CODEHS practique el principio de la independencia quiere decir que, como organismo, no está ligado a partido político alguno como institución; sin embargo, sus miembros, si así lo desean, pueden pertenecer o afiliarse a alguno de aquellos y a manifestar libremente sus opiniones políticas. La independencia, sin embargo, en este último caso, significa que tales opiniones no pueden prevalecer frente a los intereses que defiende la organización. El CODEHS no sólo es independiente de las organizaciones políticas sino, además, de todas las instituciones del Estado.
No es, por consiguiente, el CODEHS, una organización antipartido, sino mantiene independencia de ellos, aún cuando algunos de sus integrantes puedan militar en esas instancias.

2.-Autonomía.
Que el CODEHS defienda el principio de la autonomía como uno de sus soportes teóricos significa que reivindica no sólo para sí sino para todas las organizaciones sociales su derecho a actuar en la vida pública de la nación sin sujeción a ideologías, a imposiciones arbitrarias o a regulaciones en cuya gestación no hubieren intervenido.

En ese orden de ideas y en el ejercicio de este derecho a la autonomía, sostiene el CODEHS que los movimientos sociales pueden darse la organización que estimen conveniente para sus intereses, aunque ello les signifique pasar por encima de las leyes de la nación.

Por lo mismo, reconoce el CODEHS el derecho que tienen las organizaciones sociales a resolver libremente sobre el tipo de sociedad de la cual van a formar parte; y, dentro de ellas, con mayor razón, las organizaciones sindicales. Por lo mismo, no es sino en virtud de este principio que puede entenderse a cabalidad un hecho relevante en la historia del movimiento sindical chileno. En efecto, cuando bajo la dirección de Clotario Blest se organizó la primera gran central sindical (‘Central Única de Trabajadores de Chile’ CUTCH, primero; simplemente CUT, después) fue deseo de su máximo dirigente que esa organización hiciese suya la frase que Karl Marx acuñara para la Primera Internacional según la cual “la liberación de los trabajadores ha de ser obra de los trabajadores mismos”. Y era que, en el ideario de Blest, no solamente las organizaciones sociales tendrían derecho a pronunciarse acerca de la forma que deberían adoptar para sí mismas sino, además, sobre aquella que debería tener la sociedad destinada a reemplazar a la vigente. Este derecho compete exclusivamente a las organizaciones y no a los especialistas, a los Comités de Expertos o a los personajes creados al amparo de la cultura mercantil vigente.

3.- Cooperación.
Que el CODEHS practique el principio de la cooperación significa que, para sus integrantes, el fundamento de las relaciones humanas es la colaboración entre individuos, la ayuda mutua, la unión y sostén de las personas entre sí.

Rechaza, por tanto, el CODEHS, el establecimiento del principio de la competencia como forma de vida para la sociedad humana, lo que lo hace entrar en profundo antagonismo con el modo de acumulación instaurado en numerosos sectores del globo terráqueo por el actual sistema vigente; el CODEHS acepta solamente la competencia como la forma más extrema de dirimir los conflictos y, en especial, cuando quien o quienes recurren a ella se encuentra(n) en estado crítico de necesidad.

4.-Solidaridad.
Que el CODEHS reconozca y promueva el principio de la solidaridad implica considerar como pilar de las relaciones humanas no sólo la ayuda mutua sino, además, el apoyo irrestricto hacia quienes se encuentran en estado de indefensión. Se trata de una labor en donde el referido apoyo no se brinda por exigirlo así una relación de reciprocidad sino frente al deber que respecto de otro tiene todo ser humano por el simple hecho de ser tal.

La práctica del principio de solidaridad ha hecho que el CODEHS se sienta profundamente comprometido con quienes han sido víctimas de atropellos a los derechos humanos, entendidos como tales aquellos que practican solamente los Estados a través de sus organismos de vigilancia y represión.

En el ejercicio de ese principio, toma el CODEHS como labor suya la defensa y promoción irrestricta de los derechos humanos y sindicales, y la denuncia y difusión de los mismos.

5.- Laicidad.
El CODEHS es un organismo laico, lo cual quiere decir que no practica religión ni filosofía alguna que obligue a sus miembros a pronunciarse de determinada manera sobre tales aspectos de la vida. En consecuencia, el Comité no está ligado a organización religiosa ni filosófica alguna lo cual, al igual de los principios anteriores, no implica que algunos de sus miembros puedan practicar determinada fe o afiliarse a alguna organización de esa especie. La laicidad de la organización significa, únicamente, que los intereses defendidos por ésta deben prevalecer por sobre las creencias y sobre los efectos que sobre aquellas tengan algunos de sus asociados.

6.- Diversidad.
El CODEHS reconoce el principio de la diversidad de la naturaleza, que hace a los seres humanos diferentes a unos de los otros según sus aptitudes y cualidades, pero iguales en los derechos como miembros de una sola especie.

De este principio deriva el hecho que en una sociedad deban coexistir formas de vida disímiles, pues lo que hace uno sirve a quien no tiene idéntica aptitud o calidad, de la misma manera que sucede con éste respecto a aquel. Este principio no solamente implica reconocer la existencia de tales aptitudes o calidades que hacen al ser humano un sujeto interdependiente. Implica, además, reconocer la existencia de minorías sociales que siempre han de ser consideradas y respetadas. Ello explica que el CODEHS no acepte la imposición de la voluntad de las mayorías por sobre las minorías, sino una forma de dirección social que contemple la activa participación de esas minorías en forma conjunta con las mayorías.

En virtud de este principio sostiene el CODEHS que los modelos de organización de las agrupaciones humanas pueden no ser idénticos o compatibles respecto de aquellos que emplean otras y que, sin embargo, no por eso dejan de ser menos válidos y respetables.

Del mismo modo, reconoce el derecho que las personas y organizaciones  tienen a defender sus principios y formas de actuar, siempre y cuando aquellas y éstas mantengan estricta correspondencia con el respeto a la vigencia de los derechos humanos.

Por lo mismo, defiende el CODEHS la existencia de sociedades multiétnicas o plurinacionales, vale decir, sociedades en las que conviven personas cuyas diferentes culturas han no sólo de respetarse sino considerarse bajo toda circunstancia y oportunidad.

Se deriva de lo dicho que reconoce el CODEHS la necesidad de establecer constituciones, leyes o cartas fundamentales destinadas a regir la conducta de las agrupaciones humanas nacidas de las propias bases sociales, en donde tengan lugar destacado las diferentes naciones que pueden integrar determinados Estados.

7.- Universalidad.
El CODEHS manifiesta estar convencido que la naturaleza conforma una sola estructura; en consecuencia, sostiene la existencia de la unidad del ser humano con la naturaleza dentro del cosmos por lo que considera que la evolución de las sociedades sólo puede ser posible en estrecha unión y equilibrio con aquélla.

En concordancia con ese principio, la visión que tiene de determinados derechos y principios es universal.

La universalidad implica, además, la capacidad de entender a la sociedad humana como un todo, como un conjunto que no puede ser considerado como la simple sumatoria de las partes sino como un ente diferente, complejo. El CODEHS acepta aplicar la especialidad de las disciplinas científicas al progreso de la especie, pero rechaza todo intento que lleve a esas especialidades a tomar la dirección de un conjunto social.

8.-Ecológico.
Por lo mismo, sostiene el CODEHS que, así como la naturaleza se organiza en una suerte de juego que hace oscilar las corrientes oceánicas y aéreas de todo el planeta para mantener la homeostasis del mismo, también los seres humanos tienden a organizarse en sistemas globales que funcionan a lo largo y ancho del mismo en todas las épocas y lugares.

El CODEHS sostiene que existe hoy un sistema capitalista, un sistema social de dominación que, como los demás, tiende a hacerse rápidamente global. Sin embargo, dado el caso que sus principios son contrarios a los principios humanistas y ecológicos que el CODEHS reivindica para sí y para las demás organizaciones sociales, ese sistema debe ser abolido para establecer en su reemplazo uno que refleje el carácter fundamentalmente solidario que tiene el ser humano.

El principio ecológico que guía las acciones del CODEHS lo hace profundamente internacional pues entiende que el planeta posee una estirpe humana, una especie que se ha extendido por todos sus rincones, pero que es una, independientemente de la forma de organización que se hayan dado los diversos asentamientos sociales establecido a lo largo y ancho del planeta.

9.- Internacional.
El CODEHS concibe al ser humano como una sola especie que se ha instalado en diversas partes del planeta; es, por lo mismo, una organización eminentemente internacionalista. Rechaza, en consecuencia, los sistemas de dominación que se establecen en determinadas áreas del planeta y hace suyas las luchas que libran otros seres humanos por alcanzar mayores espacios de libertad.

10.- Colectividad.
El CODEHS es una estructura social colectiva, es decir, formada por individuos cuya toma de decisiones y forma de funcionar considera la opinión de todos aquellos que la integran. Es, por tanto, una estructura que está en permanente discusión y en constante búsqueda del encuentro consigo misma. Nada se agota en una primera o segunda discusión, sino en el consenso de quienes la integran. El CODEHS es, en consecuencia, un colectivo, una organización en donde el conjunto de sus miembros, el colectivo, la globalidad de quienes la integran, es quien se pronuncia sobre la cuestión que concita su atención. Las resoluciones son del CODEHS, no de personas particulares o de dirigentes, sino de una institución.

Este principio, al igual que el de la diversidad, obliga a los miembros del CODEHS a resolver sus contradicciones en el intercambio de ideas y no en la imposición de mayorías sobre minorías que es, también, una forma de dominación.

El principio de la colectividad hace que, incluso, estos mismos principios puedan estar permanentemente en proceso de revisión y elaboración a fin de entregar una visión siempre colectiva de lo que piensan sus miembros.

11.- Horizontalidad.
El CODEHS estima que la forma de organización de toda estructura social ha de ser la horizontalidad, vale decir, la existencia de funciones propias del cuerpo social que es necesario desempeñar para establecerse en su interior, pero que no han de implicar por motivo alguno cierta forma de jerarquización.

Por consiguiente, rechaza el CODEHS toda verticalidad de mando o establecimiento de privilegios que establezcan odiosas separaciones entre quienes participan en ella.
En armonía con lo expresado, el CODEHS no tiene una estructura de mando ni de dirigencia, sino todos sus miembros mantienen entre sí iguales derechos y obligaciones. Lo que uno diga es voz del CODEHS, que no tiene presidente ni secretarios sino ‘voceros’, removibles, que tampoco son quienes deciden, sino hablan en nombre de sus bases quienes sí deciden y toman acuerdos.

Su organización es, por ende, reticular, en forma de red, que se opone a la piramidal en donde las cabezas de las pirámides se unen para conformar estructuras humanas cada vez más alejadas de la base social. Las agrupaciones humanas que se organizan horizontalmente, también establecen sus contactos y relaciones de manera plana o de la misma forma horizontal en un conjunto de verdaderas redes de comunicación.

Los miembros del CODEHS son todos iguales en su calidad de personas; no hay quienes sean más que otros; lo conforman personas corrientes, no personalidades, sino seres humanos comunes. Su fundador, Clotario Blest R., sentía profundo recelo respecto de las personalidades.

Aprobados en la reunión realizada en Santiago, sábado 11 de octubre de 2014.